Según la asociación comercial Danish Shipping, más del 50% de los 67 buques actualmente en construcción por navieras danesas serán propulsados por combustibles sostenibles. Esta iniciativa refleja un incremento del 7% en el tonelaje encargado en comparación con el año precedente. Destacando aún más el compromiso con la sostenibilidad, más del 80% de este nuevo tonelaje podrá operar con combustibles ecológicos.

¿Qué son los biocombustibles sostenibles en transporte?

Los biocombustibles sostenibles son combustibles producidos a partir de materia orgánica renovable, como cultivos agrícolas, residuos forestales o desechos animales. Estos biocombustibles se consideran sostenibles porque su producción y uso tienen un menor impacto ambiental en comparación con los combustibles fósiles.

Se busca que los biocombustibles sostenibles reduzcan las emisiones de gases de efecto invernadero y minimicen la competencia con la producción de alimentos. La sostenibilidad de los biocombustibles se evalúa considerando su ciclo de vida completo, desde la producción hasta su uso final.

El objetivo es utilizar materias primas renovables y gestionadas de manera responsable para la producción de biocombustibles. La mejora continua en los procesos de producción y la selección de materias primas adecuadas son clave para garantizar la sostenibilidad de los biocombustibles.

La investigación se centra en desarrollar tecnologías más eficientes y económicas para la producción y el uso de biocombustibles sostenibles. En Europa destaca el impulso del biometano en España, aunque también el desarrollo del hidrógeno jugará un papel relevante.

La importancia de los biocombustibles sostenibles en transporte

La importancia de los biocombustibles sostenibles en el transporte radica en su capacidad para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y disminuir la dependencia de los combustibles fósiles. Estos biocombustibles son derivados de fuentes renovables como cultivos agrícolas, residuos orgánicos y biomasa forestal.

En el ámbito del transporte, los biocombustibles sostenibles ofrecen una alternativa más amigable con el medio ambiente. Al ser producidos a partir de recursos renovables, ayudan a mitigar el cambio climático al reducir las emisiones de dióxido de carbono (CO2) y otros contaminantes.

Además, los biocombustibles sostenibles en el transporte contribuyen a la seguridad energética al diversificar las fuentes de combustible, disminuyendo la dependencia de los combustibles fósiles importados.

La aplicación de biocombustibles en vehículos existentes requiere mínimas modificaciones en la infraestructura, lo que facilita su adopción a gran escala en comparación con otras tecnologías alternativas.

Ejemplos actuales de biocombustibles sostenibles en transporte marítimo

Es relevante citar que la naviera danesa AP Møller-Mærsk inauguró recientemente el primer portacontenedores del mundo. El Laura Mærsk es capaz de navegar con etanol ecológico, evidenciando un liderazgo pionero en la implementación de tecnologías sostenibles.

Además, Maersk se encuentra en la vanguardia al anticipar la recepción de un gran buque portacontenedores propulsado por metanol. Tiene una capacidad para 16,000 contenedores (TEU), y está equipado con un motor de doble combustible adaptable a metanol, biodiésel y combustible convencional. Esta innovación, construida por Hyundai Heavy Industries (HHI) en Corea del Sur, se lanzó el pasado mes de octubre. Este hito lo ha impulsado a ser el segundo portacontenedores del mundo con capacidad para utilizar metanol ecológico.

Entre los proyectos biocombustibles sostenibles en transporte marítimo daneses, destaca el buque de operaciones de servicio (SOV) desarrollado por ESVAGT y Ørsted, programado para su recepción edurante este año. Este buque será el primero en su categoría capaz de navegar exclusivamente con combustibles ecológicos, marcando un avance significativo en la adopción de prácticas sostenibles en la industria naval.

El compromiso de las navieras danesas con la transición ecológica es innegable. El hecho de que más del 80% del nuevo tonelaje pueda operar con combustibles sostenibles representa un logro notable. Estos buques no solo cumplirán con los estándares ambientales, sino que también reemplazarán embarcaciones más antiguas y menos eficientes energéticamente, consolidando así un progreso bien recibido en la industria.

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Tipos de biocombustibles utilizados en transporte

En la actualidad, existen varios tipos de biocombustibles sostenible en transporte, cada uno con características específicas y métodos de producción distintos. Uno de los biocombustibles más comunes es el biodiésel verde. Este combustible se obtiene, principalmente, a partir de aceites vegetales. Emplea como materias primas la soja, el maíz o el aceite de palma. Este combustible puede utilizarse en vehículos diésel convencionales con mínimas modificaciones en los motores.

Otro tipo relevante es el bioetanol, producido a partir de cultivos como el maíz, la caña de azúcar o la remolacha. El bioetanol se mezcla con la gasolina convencional para reducir las emisiones y aumentar la eficiencia del combustible.

También encontramos el biogás, generado a través de la descomposición anaeróbica de materia orgánica, como residuos agrícolas, estiércol o residuos sólidos urbanos. Este gas puede ser utilizado como combustible en vehículos adaptados o convertido en biometano para inyectar directamente en la red de gas natural.

Los biocombustibles de segunda y tercera generación, como el bioetanol celulósico y el biodiésel de algas, están en desarrollo y prometen ser más eficientes y sostenibles en términos de uso de tierras y recursos.

Beneficios y retos de los biocombustibles sostenibles

Los biocombustibles sostenibles en transporte ofrecen una serie de beneficios significativos, pero también enfrentan desafíos importantes que deben abordarse.

Los principales beneficios son:

Reducción de emisiones: Los biocombustibles ayudan a disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero en comparación con los combustibles fósiles, contribuyendo a mitigar el cambio climático.

Diversificación de fuentes de energía: Promueven la diversificación de las fuentes de energía utilizadas en el transporte, reduciendo la dependencia de los combustibles derivados del petróleo.

Apoyo a la economía local: La producción de biocombustibles puede beneficiar a las comunidades agrícolas locales, creando oportunidades económicas y fomentando la seguridad alimentaria.

Menor contaminación local: Los biocombustibles suelen producir menos contaminantes locales, como partículas y óxidos de nitrógeno, en comparación con los combustibles convencionales.

Por otro lado, para disfrutar de estas ventajas, aun se deben superar algunas barreras. Los mayores desafíos actualmente son:

Competencia con cultivos alimentarios: La producción a gran escala de biocombustibles puede competir con la producción de alimentos, lo que plantea desafíos para la seguridad alimentaria.

Uso de tierras y recursos: Requieren grandes extensiones de tierra y recursos hídricos para la producción de materias primas, lo que puede tener impactos ambientales y sociales.

Eficiencia y escalabilidad: Algunos biocombustibles aún enfrentan desafíos en términos de eficiencia energética y viabilidad económica a gran escala.

Infraestructuras insuficientes: La infraestructura adecuada para la producción, distribución y uso de biocombustibles debe desarrollarse y expandirse para su adopción generalizada.

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