El precio de la luz de hoy en día se ha disparado hasta límites insospechados. Los mercados mayoristas de electricidad europeos se han convertido en una ruleta rusa. Pero, ¿cómo ahorra en luz un consumidor con unos precios tan altos en el mercado? La tarifa PVPC (Precio Voluntario al Pequeño Consumidor) es ideal para recargar los vehículos eléctricos, ya que ofrece el periodo valle mientras tenemos nuestro vehículo aparcado durante la noche. El problema es que el resto del día debemos atravesar ocho horas con un precio extremo para la electricidad y saltar entre las horas valle, para poder esquivar este asalto a mano armada.

¿Qué medidas de ahorro de electricidad podemos aplicar en nuestras casas?

Las medidas de ahorro de electricidad más fáciles de aplicar  en nuestra vivienda u oficina son:

    • Emplear una decoración que refleje la luz, con colores claros y minimalista para poder dejar que la iluminación natural se adentre.
    • Apagar los aparatos electrónicos en stand by.
    • Cambiar las bombillas antiguas por otras de bajo consumo led.
    • Aplicar medidas de aislamiento térmico, como colocar ventanas de PVC o material aislante en paredes, suelos y techo.

💰 Más medidas de ahorro de electricidad a nuestro alcance

Las medidas de ahorro de electricidad se pueden agrupar y elaborar un plan de ahorro de energía. Si prefieres ser más directo, te mostramos unas medidas de ahorro de electricidad adicionales y ampliadas, que te ayudarán en tu objetivo de bajar el precio de la factura de la luz. Cada paso que des más beneficios lograrás.

Bombillas LED

La tipología de bombillas repercute notablemente en la factura de la luz. Apostar por las de LED en lugar de incandescentes supone un ahorro de más del 80%, pues necesitan mucha menos energía para su funcionamiento y la cantidad de luz que dan es la misma. Además, duran mucho más: de media 9 años, frente al año y medio de las bombillas tradicionales. Igualmente, las bombillas LED son más eficientes y suponen un mayor ahorro que las de tipo halógenas o de bajo consumo.

Luz natural

Aprovechar al máximo todas las horas de sol con las cortinas y persianas abiertas para que entre la luz natural. Apagar siempre la luz si no se está utilizando o no es estrictamente necesaria.

Uso eficiente en calefacciones eléctricas

A mayor número de grados, más gasto de calefacción. Se recomienda, además, el uso de termostatos automáticos de regulación de temperatura para su control.

Ahorro en dispositivos electrónicos

Cargar la batería al completo y en modo avión, no dejar los aparatos eléctricos en modo standby para reducir así un 10% al año en la factura o sustituir pantallas normales por LCD para ahorrar hasta un 37% de energía son algunos trucos de ahorro en el uso de dispositivos electrónicos. 

Potencia real vs contratada

Normalmente la potencia eléctrica contratada es mayor a la necesidad real de consumo de un hogar, pagando un coste superior al que realmente se necesita. Por tanto, es recomendable revisar la potencia de electricidad contratada, es decir el número de aparatos que se pueden tener enchufados al mismo tiempo sin que salte la luz. ¿Cómo? Sumando el gasto de todos los aparatos eléctricos del hogar y a partir de esta suma contratar la potencia necesaria.

Tarifa de discriminación horaria

Tanto para hogares con tarifa regulada o PVPC como para los que ajustan su factura eléctrica según el mercado libre, es posible contar con las ventajas de discriminación horaria. Se trata de concentrar una gran parte del consumo eléctrico (al menos el 30%) en una franja horaria que va de las 22h hasta las 12h todo el año y desde las 23h a las 13h en verano.

Uso óptimo de los electrodomésticos en la cocina

Estos aparatos suponen un importante gasto en la factura eléctrica y con pequeños trucos se puede reducir esta cuantía:

· No abusar del uso del horno para cocinar, pues es uno de los electrodomésticos de mayor consumo. Cuando se utilice, no abrirlo varias veces porque pierde temperatura y gasta más al tener que calentarse de nuevo.

· Aprovechar calor residual de la vitrocerámica y el fuego, apagándolo unos minutos antes de que la comida esté lista.

· Evitar abrir y cerrar el frigorífico con mucha frecuencia y mantenerlo en una temperatura de 5º para refrigeración y -18º para congelación.

· A la hora de lavar la ropa, poner la lavadora a una temperatura entre 40-60º implica un ahorro del 40%